Estás a un paso de reconectar contigo…
SANACIÓN ENERGÉTICA CHAMÁNICA
Durante una sesión, canalizo a través de mis manos una energía sanadora que busca, desbloquea y disuelve todo aquello que impide el libre flujo de tu vitalidad y bienestar. Cada toque, cada gesto, está impregnado de una intención profunda de liberar, limpiar y revitalizar tu cuerpo, mente y alma.
Con la ayuda de la canalización y la conexión con tus guías espirituales, accedemos a la raíz de lo que necesitas soltar: ya sean densidades, emociones atrapadas, mal de ojo, amarres o simplemente un exceso de ruido interno.
Al finalizar, sentirás una sensación de alivio, calma y claridad. Este bienestar no solo es inmediato, sino que se sigue expandiendo en los días posteriores, como una semilla que empieza a florecer en tu vida.
✨ Cada sesión es un viaje de regreso a ti.
Duración: 60 min
Modalidad: Online o presencial
Aportación: 50 €
Testimonios Sanación Energética Chamánica
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"Sentía que seguía atado emocional y energéticamente a mi expareja, sin poder soltarla. Durante la sesión, se descubrió un fuerte amarre energético y fue liberado. Al día siguiente ya no sentía la opresión en el pecho y pude dormir profundamente. No imaginaba que un cambio tan grande pudiera llegar tan rápido a mi vida."
Javi
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"Llegué sintiéndome agotada, desconectada de mí misma y sospechando que me habían hecho mal de ojo. Durante la sesión se liberó esa energía negativa que afectaba a mí y a mi pareja. Al terminar sentí cómo la vitalidad volvía a mi cuerpo. Volví a sentirme yo misma, con claridad y ligereza en el corazón."
Rosa
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"Vivía con episodios de parálisis del sueño y una sensación constante de no ser yo misma. Durante la sesión descubrimos una energía ajena que estaba bloqueando mi cuerpo y mi vitalidad. Al liberarla, sentí mis piernas ligeras y llenas de vida de nuevo. Me desperté como si volviera a ser yo, con una nueva energía para seguir adelante."
Judith
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"Mi pareja intuía que mi ex me había hecho mal de ojo, y resultó ser cierto. Durante la sesión se liberaron el mal de ojo, el amarre y la energía negativa que me habían incrustado. Después me sentí más ligero, con mejor humor y pudiendo dormir bien. Mi vida dio un giro de 180 grados en muy poco tiempo."
Salvador